domingo, 11 de abril de 2010

Demasiado niña, demasiado pobre

Ana Teresa Benjamín

Lo de la cantina fue el colmo. A Dolores ya le habían contado algo, pero como todavía guardaba un poquito de fe en su marido no lo creyó sino hasta que lo vio. Y era verdad. El mangajo llevaba días llevándose a Aura María a la cantina, y ahí se quedaba horas hasta que caía de borracho.

Cansada de tanta rabia se vino huyendo. Bajó del cerro La Popa y, siguiendo la ruta del caucho de los palenqueros, llegó hasta Escobal. Aura María tenía tres años y Dolores levantó una casita sobre pilotes. Vendió frituras por mucho tiempo y, cuando la hija tenía 15 un hombre tocó a la puerta: "Quiero casarme con su hija, ño Dolores".

Era alto, de cabello cano y bigote delgado. Se llamaba Humberto, tenía 35 y vivía en la ciudad de Colón. Dolores vio que tenía buen porte pero lo encontró muy viejo. Pero Aura María insistió y ganó.

El día que Humberto llevó a María a la casa grande de su madre, Mercedes la miró fijamente, la recorrió entera y le dijo a su hijo: "Es blanca, tiene buen apellido, pero qué pobre que es".

Aura María y Humberto no alcanzaron a vivir felices para siempre.

5 comentarios:

  1. Buenisimo...me gusto "ño Dolores#. Esperemas las historias de los otros compañeros. ¡Aloo!

    Jose G.P

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  2. Una niña con un padre irresponsable y ausente, un marido mayor pero dominado por su prejuiciosa madre,dos seres frágiles, una historia de amor desventurada. Aquí hay material para una novela, pero está resuelto en 17 líneas.

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  3. Es de mérito que todo tiene un sabor y clima de genuino color local. Logras traducir la dureza del recorrido vital de nuestros típicos parroquianos.

    M. A.

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  4. Contundente y real. Muy bueno

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  5. Que bien contado el encuentro con Gabo. Me hubiera gustado leer mas, pero tal cual esta redactado me encanto, tal vez parte de ser tan corta es lo que tiene de buena la cronica que has escrito. Creo que Gabo merece mas lineas no anda uno por ahi diciendo fijate que me tropece con Garcia Marquez. O tal vez es larga la nota pero esta tan buena que la veo corta. Ahhhh y que sabia y ramplante la opinion que te dio sobre la demanda, te dijo como cuando le da a uno varicela o papera de pequenno, es mejor ahora que eres chico, cuando grande puede ser peor. Asi se contenta uno de su fortuna con el cuerpo lleno de ampollas, de granos y amigdalas abultadas y ya de grande nos toca reirnos de los que vemos sufriendo con las enfermedades infantiles, porque nosotros ya la pasamos.

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